Si después de todo final no hay un comienzo
entonces en verdad no termina.
*
Si el día no muere en la noche
entonces no puede amanecer.
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Si después de la tormenta no llega la calma
entonces no hay un momento para la meditación.
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Si detrás de cada experiencia no hay aprendizaje
entonces se cometen los mismos errores.
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Si algo realmente se quiere
entonces se puede llegar a alcanzar.
*
Por eso, después de todo final hay un comienzo
aunque involucre a los mismos personajes.
17 comentarios:
y los mismos personajes quizás, para ese entonces, para esa nueva largada, hayan adquirido nuevas aristas que los hayan dejado aún más enriquecidos...
si no podemos redescubrirnos cada día, a cada comienzo, no valdría la pena, no?
besos!
por supuesto, nunca somos los mismos y nuestras decisiones, nunca son tan definitivas. Siempre hay espacio para reconsiderar y aprender de aquello ^^.
Así es pues niña, toy enfermita, llevo casi una semana entera en cama, pero ya me voy sintiendo mejor de ánimo y físicamente también.
Gracias por pasar a verme siempre ;)
besitos!
Mi apreciada madam, leo con atención, como suelo hacer siempre, tu escrito.
Comparto lo obvio, tan bien moldeado con tus frases.
Sobre las dos últimas si deseo comentar que:
A veces llega el final y no hay comienzo sino un estado en el limbo del no saber, de encrucijada que despista, de duda permanente que nos arrastra hacía un dejar pasar el tiempo sin definir nuestro destino, esperando que se encienda la luz de algún farolillo que nos indique.
Si los personajes no cambian, ya sabes lo que sucede con las segundas partes, nunca buenas ( al menos eso dice el dicho).
Tampoco me tomes muy en serio, pero me encanta comentarte saboreando una copa de buen vino y sentirme como en casa. Nuestra charla pendiente a la luz del farol y de fondo sonando algo de Satie.
Ah… y un beso especial de Otoño, como caricia de hoja descendiendo.
Y decía Borges, que la historia se escribe a saltos discontinuos, lo que me lleva a pensar si en verdad la historia que termina recomienza (lo cual puede ser muy cierto), o si pudiera ser que una historia terminase siempre con la sublimación de un acto dramático, vease: la muerte, la despedida definitiva, la locura del protagonista... Me resulta algo complejo el pensar que después de un supuesto final "forzado" (forzado como la mayoría de los finales, que surgen de repente sin que los personajes tengan conciencia de ello) los involucrados sean capaces de reintegrarse en la historia, de superar ese ambiente trágico que resulta de la derrota en lucha por la supervivencia. Siempre podremos añadir "esta historia es otra" o "este es un nuevo principio". Pero lo que caracteriza a un final, por lo menos en lo literario, es el silencio por el que opta el narrador después de haber visto suficiente. Y es que... ¿Es necesario reiniciar la historia con los mismos personajes, cuando podríamos probar mejor suerte que lo que la vida nos ofrece ahora?
Sea cauta, Madam... porque la misma historia puede llegar a repetirse una y otra vez, aunque parezca otra.
"pero nada sirve sin final"
siempre lo digo y lo escribo.
lindo texto, reflexivo.
suerte!
Julieta: ¡Siiiiiiiii! si no, no habría "segunda vuelta". Hubo que hacer esos ajustes... de los fundamentales, vio?
¡Gracias por pasarte!
Nori: Hay veces que hay que hacer re-consideraciones, importantes... pero aprender es siempre fundamental!
¡De nada, niña! ¡Espero te mejores!
Robin: Comparto lo de las segundas partes pero creo que no es el caso. Esto es más como que hubo un punto de inflexión y fue indispensable definir un rumbo. ¿Viste cuando hay que tomar decisiones?
¡Qué lindos los besos otoñales! ¡Yo le mando uno primaveral!
colorprimario: A mí también me resultaba extraño que los involucrados sean capaces de reintegrarse... y lo creía muy improbable. ¡Pero me alegro de equivocarme algunas veces!
Soy la primera en desconfiar de la buena suerte y tampoco soy conformista... pero realmente siento que está todo mejor que antes, aunque me asuste admitirlo!
Lo curioso es descubrir que haya que sangrar para valorar las cosas.
¡Gracias! ¡Gracias de verdad por aconsejarme, tal cual yo lo haría con vos! Prometo ser cauta, ¡está en mi naturaleza!
Santiago:¡Gracias! Es reflexivo... y verdadero. ¡Qué bueno que te haya gustado!
Nos estaremos viendo...
Siempre por más que aprendamos cometemos el mismo error; de boba, enamoradas o por simple resistencia al genero opuesto.
Es como una inevitable tentación de la que las débiles no tenemos salvación. Un circulo vicioso de nunca acabar.
Beso, Diva
Madurez es la clave.
Una relación, como todo, puede y debe tener etapas.
Hablar las cosas es importante, que no quede nada de la etapa anterior sin decirse, nada que se de por sobreentendido, vale tambien para las nuevas relaciones, si uno empieza a proyectar o prende la factoria de la desilución idealizando al otro ahi ya se empieza mal.
igual... lo importante no es la meta sino el camino.
beso
Diva: Se comete el mismo error si no aprendimos nada. Si cambiamos la perspectiva y nos comprometemos realmente la historia puede ser otra...
Qubic: ¡Totalmente de acuerdo! Madurar es lo importante y viene de la mano del aprendizaje.
Si el camino se disfruta la meta tiene como un plus... un agregado de sabor extra
como va la vida lady?
Me he sentido tan feliz de recibir tus palabras que olvidé o postergué momentáneamente tu comentario para venir a decirte, lo primero, que ya te echaba de menos, mi querida madame.
El poema no es actual, excepto la última frase y creo que hablo del tiempo inapelable, el que lleva cabalgando en su lomo al infinito, y digo creo porque siempre reflexiono después de tus palabras.
Sin duda este comentario es consecuencia de lo que deseaba enviarte otro amistoso beso.
hola preciosa!
puede salir de sus duda respecto de qué pasaba el 7 de octubre en incitación
besitos!
Hola!
Que tal?
Bueno antes que nada, gracias por firmar mi blog, se me pasó por la cabeza empezar a escribir cosas que pienso y publicarlas en internet, aunque se que nadie va a firmar ni mucho menos se tomaran el tiempo en leer, porque nadie lee, todo el mundo esta posteando y firmando "jeje, que linda foto, pasé, saludos!", en los flogs y ni siquiera leen el contenido.
Y si, las ideas utopicas que leiste en mi blog son nada mas que eso, ideas, pensamientos, nada que quiera hacer realidad, je, pero a veces esta bueno concientizar y reflexionar en el mundo en que vivimos, porque muchas veces lo olvidamos...
Suerte!
Qubic: ¡Excelente! La vida me sonríe...
Robin: Siempre es bien recibido un amistoso beso... y gracias por pasar y recordar este pequeño espacio que tenía un tanto desactualizado...
Nori: ¡Si! Pasé y leí el breve resumen de su fecha especial... lo dije antes y lo repito: ME ALEGRO MUCHO POR TI, NIÑA!
cancion_animal: ¡No me ofendas! y no te tires abajo muchachito... que hay personas que todavía leen y reflexionan sobre lo que vale la pena, con un cierto filtro, claro está... no sé puede meditar sobre TODO lo que se lee en la web. Yo me propuse comentar en los blogs cuyo contenido por alguna razón me impulse a hacerlo... no todo se transmite a través de foto(log)s!
Que razon tienes en lo que dices.Siempre se puede volver a empezar,por mas duro que sea el final.No te habia escrito antes,porque tenia problemas en mi blog,no me permtia dejar comentarios.Espero que este te llegue sin inconvenientes.Felicidades.Miriam
Miriam: ¡Muchas Gracias!
Ahora que estoy con tiempo voy a agregar el link a tu blog en el mío. ¡Nos veremos!
La realidad se nos presenta semejante a un rompecabezas. Vemos una ficha de una forma, de otra, la damos vuelta, la volvemos a enderezar y no tiene forma. No entendimos esa parte de la historia. La dejamos y empezamos de nuevo con otra. Lo mismo, vueltas y vueltas. Con el tiempo vemos que cada cosa que nos pasó, cada ficha del rompecabezas, cada historia, cada comienzo, cada final son parte de lo mismo. Parte de nuestro viaje. Son hojas de nuestro diario personal. No creo que sean finales y comienzos. Veo la misma historia dividida en capítulos. Al final del cuento, como con el rompecabezas, vamos a descubrir que cada pieza, que cada capítulo tenía su razón de ser.
Lo importante siempre, creo, es no traicionarse. Seguir tu corazón. Si es así, cuando se acerque el final del camino vamos a poder mirar atrás y recorrer una y otra vez las historias que escribimos sin nada que reprocharnos. Sin pedir perdón y agradeciendo a cada uno de los personajes que nos acompañaron en esta única función que nos toca presentar en nuestro escenario cotidiano.
Besos y gracias.
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